miércoles, 17 de junio de 2015

Remedios naturales

Había pasado un año desde que me diagnosticaron Rosácea y empecé a estudiar en la universidad, donde iba super maquillada intentando disimular el estado de mi cara que cada vez iba a peor, al entrar a la universidad conocí a una chica muy tierna y dulce de aspecto nórdico pero que tiene mas arte que una guitarra, ella tenía la cara perfecta y suave, sentí envidia pero de la sana porque yo también quería tenerla así, ella observaba la mía pero no se atrevía a preguntarme el por qué de que la tuviese así y por qué iba tan maquillada, en esa misma universidad conocí a otra compañera que tras presentarme lo primero que me preguntó fue que porqué tenía así mi rostro, en ese momento quise que me tragara la tierra puesto que me dí cuenta de que ni el maquillaje disimulaba mi aspecto, tras conocernos las tres y otras compañeras de clase, la primera me aconsejó que no me echara nada en la cara, que no tuviera tantos complejos puesto que mi carácter divertido y alegre era mi mejor maquillaje, que la belleza se mira en el interior no en el exterior ( eso decía ella sin saber que tras ese carácter escondía una chica tímida, negativa, con poca confianza en si misma y que poco se quería), mientras que la segunda se dedicó a buscarme por Internet multitud de maquillajes especiales para disimular la rosácea..¿y a quien le fui a hacer caso? a la de los maquillajes...me compré de todo tipo de marcas de maquillaje ( Clinique, Max Factor, L´Oréal...) pero ninguno me funcionó todos me irritaban la cara aunque me disimularan un poco pero luego se absorbían y me provocaban más granitos aunque yo me desmaquillara con mucho cuidado...

Estaba desesperada, ya no sabia que mas echarme en la cara, un día hablando con una de las amigas de la que me buscó los maquillajes me aconsejó que por qué no me aplicaba remedios naturales puesto que ella conocía a una chica con acné que al aplicárselos le habían desaparecido los granitos.

Como loca me puse a buscar en Internet remedios naturales que me pudieran servir...

Empecé con Aloe Vera, me aplicaba la savia natural desde la planta cortándola en trocitos y echándola directamente en el rostro con suaves masajes, dejaba que esta se secara en mi cara y después me la enjuagaba y me la secaba con una toalla suave; me dejaba la piel muy suave y me la hidrataba, vi como mejoraban los granitos pero nunca me los eliminó.


Mientras que me aplicaba la sabia del Aloe Vera también me aplicaba rodajas de pepino en la cara puesto que me refrescaba bastante la cara, ya que en ese momento era verano y todos los que padecemos Rosácea sabemos de lo que el calor puede repercutir en nuestro rostro.


El último remedio que me apliqué fueron infusiones de manzanilla, las cuales me aplicaba una vez enfriadas a través de gasas en las partes mas irritadas en mi rostro; recuerdo que me bajaba notablemente la hinchazón de la cara.


Tras aplicarme dichos remedios, observaba que mi piel seguía igual, me habían servido para calmar mi irritación e hidratarme, pero los granitos y la rojez seguían ahí y cuando dejaba de echarme alguno de ellos me daban otra vez los broten que me empeoraban la cara.

Ya había tirado totalmente la toalla, me resigné a que siempre iba a tener la cara así, entonces se me metió en la cabeza que las personas me iban a rechazar por mi aspecto, me costaba salir de casa, si lo hacía me echaba un maquillaje "natural" de la marca Avon, pero aún así estaba obsesionada de que la gente que se me cruzaba solo me miraba por el aspecto de mi cara y cada vez me encerraba mas en casa, y el hecho de que empezara a estudiar a distancia favorecía mi encierro, no quería salir de fiesta ni aunque me invitaran repetidas veces a salir (otro motivo era que si salia no podía beber alcohol porque era lo que peor podia hacer para mi piel) así que solo salía para cumpleaños.

Mi estado de ánimo en ese periodo de mi vida dejaba mucho que desear, solo me limitaba a estudiar estudiar y estudiar...mi amiga la de aspecto nórdico no se cansaba de darme ánimos e intentaba convencerme de lo que me había dicho anteriormente pero no lo conseguía e incluso su novio también me decía lo mismo pero yo seguía en la misma actitud y pensamiento hasta que un acontecimiento médico provocó que volviera a acudir a la dermatóloga para cambiar mi vida...Pero esto lo contaré en el próximo post.

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